Estos centros de mesa están confeccionados en gabardina y terminados con flecos en los cuatro extremos, lo que les da un toque canchero, liviano y súper decorativo.
Miden 45 x 35 cm, un tamaño ideal para usarlos de mil maneras: como mantel individual, como servilleta XL, como repasador, o —como más me gusta usarlos— como centro de mesa para darle más luz y protagonismo a toda la mesa.
Con solo dos piezas en el centro, la puesta se eleva por completo: aportan textura, contraste y hacen que todo lo que armes se vea más ordenado y especial.
Un básico multifunción que no puede faltar en tu mesa.